Con esta defensa no vamos a ningún sitio

Anoche tampoco vi nada del partido ni tan siquiera lo escuché y cuando a eso de las once puse la radio me lleve otra desilusión y este año van muchas.  Luego vi que no jugó mal y he leído varias crónicas y en todas dicen que el Sevilla jugó muy bien pero no sería tan bien cuando acabó perdiendo el partido y volviendo a encajar dos goles tras sendos fallos defensivos. Sobre todo el segundo gol que ni en infantiles pasa ya que jamás se le puede dar un balón a un jugador de espalda y luego pedir que llegue el portero que está en el área chica, y como se suele decir entre todos la mataron y el solo se murió. Pues eso es lo que pasó en la jugada en la que intervinieron cuatro jugadores y el más listo de la clase fue el  jugador del Oporto que marco a placer el 1-2 a cinco minutos del final y poner un poco más cerca a su equipo en la siguiente fase.
Ya no se qué otra situación tan rocambolesca le podrá suceder al Sevilla para encajar un gol esta temporada y es que le ha ocurrido de todo y la sangría en defensa ya es total no hay partido en el que no se encaje algún gol y así es muy difícil conseguir la victoria. Además el entrenador no da con la tecla en la defensa y no repite nunca alineación y eso es una malísima señal. La pareja idónea es la compuesta por Escude y Sergio Sánchez y eso no se ha dado cuenta aún el entrenador del Sevilla y a este paso se irá o mejor dicho lo echaran y no se da cuenta de quienes son los jugadores idóneos en cada puesto.

Como no vi el partido tampoco voy a opinar del mismo solo voy a decir que lo que ya dije ayer se cumplió y el aspecto de las gradas en un partido de Europa League fue desalentador, ya son muchos los socios que están desencantados con el equipo y a las pruebas me remito.

La eliminatoria está difícil no hay que engañarse pero hay que dar hasta la última gota de sudor y si se aplica en defensa creo que se pueden tener posibilidades de remontar la eliminatoria pero si la sangría defensiva sigue como hasta ahora pues no cabe nada más que resignarnos a una eliminación segura del tornero que no hace mucho tiempo nos cambió la vida.

Si la situación sigue así y nos metemos en una dinámica perdedora habrá que pensar que no lo hizo tan mal un entrenador de la casa que tenía al equipo arriba y tenía al equipo con  una solidez defensiva de la que echamos mucho de menos.